ALGA Revista de Literatura
nº88-89 - primavera 2023
40 aniversario / 1983-2023




Dirección:
  • Goya Gutiérrez

    Edición:
  • Grupo de Poesía ALGA

    Responsables de la edición del presente número:
  • Enric Velo
  • Lucía León
  • Goya Gutiérrez

    Maquetación, composición y diseño web:
  • Enric Velo


  • Portada:
      Iglesia de los Franciscanos (Lucerna, Suiza)
      de Enric Velo


    Sumario
    http://revistaliterariaalga.com/

    Poesía

    ÁLVARO HERNANDO FREILE

    ÁLVARO HERNANDO FREILE. Maestro, periodista y escritor, nacido en España, "poeta local de Chicago". Cuenta con varios libros de poesía publicados en EEUU, España e Italia. Ha recibido premios nacionales e internacionales en narrativa y poesía. Editor de la colección de poesía en la editorial Baile del Sol y director del Festival Internacional de Poesía de Madrid, (im)Prescindibles. Padre de Teo.

    MI ESPERA

    La luz se ha quebrado desgastada
    como un soplo en las yemas de los dedos
    y el asombro le deja un lugar lento a nuestra lengua
    y a un nombre que serpentea en el aire del olvido.

    Todos esperamos que la flor de lirio se haga flor
    como el agua pule a sorbos los collares la sed
    y moja de vida nuestros cuellos repletos de palabras
    y de ecos confinados en los picos de las aves.

    Pero a veces la flor no es un lirio y es semilla entre los dedos
    y es el agua que nos falta y la niña que seremos,
    y es la sed después del sexo, tras el vuelo,
    y es todo lo que viene,
    como la caricia del silencio
    cuando pase nuestro tiempo.

    Desde mi boca te nombro en mi silencio
    mientras permanezco en esta espera.

    PRESAGIO

    Se yergue el presagio del uno sobre el otro.

    El temor en tus manos y en las mías
    y la luz desangrada en nuestros dedos
    albergando la quietud ilusoria de lo inmóvil
    en una tregua afilada como un corte.

    El tiempo cayendo
    cada otoño
    de los árboles
    como una semilla repleta de intenciones
    que diluye la crueldad de la distancia.

    No somos los bordes de una herida
    ni la expansión de un reflejo en las pupilas
    sino lo que la luz busca dentro de la carne.

    Somos cada cual llegando al otro:
    el día en que el silencio embaucó a la soledad
    como la vida cuando es brote que no cierra.

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