Poesía

JOSÉ LUIS RUIZ CASTILLO

JOSÉ LUIS RUIZ CASTILLO. Realizó sus estudios de Ingeniería Química en el Instituto Químico de Sarriá. Organizó y dirigió durante varios años El Festival de Flamenco de Ciutat Vella. Asimismo, Las sesiones de Poesía "Puentes Culturales" en el Pati Llimona, con la colaboración de Ferran Aisa y Albert Tugues. Ha publicado libros de poesía como: Algazara, Sarajevo Koncert, Rumores de la ciudad sin río, Ida y vuelta a Nueva York, Zarabanda, Cámara oscura, Spanish Revolution. La copla rebelde, teatro musical.

"Y ella [Francesca] me dijo: No hay dolor mayor que recordar el tiempo de la dicha en desgracia..." Dante. Divina Comedia. Canto V. Infierno A LAS PUERTAS DEL INFIERNO I El veneno que nos rodea impuesto por el río de empujes, por los consejos y por los vientos arde dentro de las entrañas. Me invade la sed, me ahoga la opresión y no consigo gritar ante las puertas eternas del infierno. ¡Mirad cómo se elevan las lenguas del fuego! Pateta me quema como es debido. ¡Vamos, diablo! prívanos del bien, de la felicidad, de la salvación. Puedo escribir estos versos al aire del infierno no importan los himnos ni el suave concierto espiritual ni la fuerza ni la paz. Todo es igual aunque a veces parece que cambia. ¿Las honradas ambiciones? Esta es la vía continua. ¡Sí, la confinación es eterna! Un hombre está condenado, una mujer también está en el infierno. - Más tarde, las delicias de la condenación serán más profundas-. ¡Esto es la vida!

A LAS PUERTAS DEL INFIERNO III -Por entre las adelfas y del loto la flor se desliza amoroso el Cisne soñador… Arthur Rimbaud ¿Dónde están las almas honestas? Son fantasmas que se acercan mientras se expande el olor a quemado. Todo son alucinaciones que se forman al principio donde empieza la historia del mar. Que vengan los poetas y los visionarios. Que muestren su avaricia de celos y relojes. El infierno está abajo y el cielo arriba y entremedio un sueño de zarzas ardientes. Las linternas no nos iluminan el camino inmediato de las olas y los misterios de las adelfas venenosas. Los poetas se pondrán celosos y los soñadores caerán en un nido de llamas.

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